Sé tú mismo. Y listo.

Tengo 23 primaveras, nací a principios de Octubre y soy Libra. También nací en el año del dragón. Como la gran mayoría sabe, los nacido en este signo somos personas difíciles de tratar, en gran parte por nuestra aplastante manera de pensar, tan lógica y tan poco pasional; la sinceridad y, sobre todo, lo rápido que nos encendemos y escupimos fuego. O como leí una vez en una página, "los del signo del dragón queman como la leche muy caliente, hay que tener cuidado con ellos". Todo eso es verídico.

Aclaro: no creo en el zodiaco, de ningún tipo, pero hay que saber reconocer cuando algo lleva razón, y es lo que me ocurre a mí con eso.

Escribo desde que era una niña. Con el paso del tiempo me he aficionado a otras cosas, como son el diseño gráfico, la lectura y la música. Hay mil cosas que me gustan, pero seguro que me dejaría cosas a medias y, a fin de cuentas, no son relevantes.

Como iba diciendo, tengo 23 años y soy libra. Como muchas personas de este mundo, nací diferente. O al menos así es como nos suelen catalogar. A veces hay personas que son tan complicadas, tan enrevesadas, que son difíciles de tratar. ¿Veis por dónde voy? Yo soy una de esas personas difíciles, empezando porque no sé entenderme ni yo. Es como si mi mente fuese deforme, o se tratase de un bosque bajo el hielo de la antártida. Incluyendo un montón de cuevas que me dejan hueca por dentro.

Como terapia para ayudarme a salir de todo lo que ocurre en mi cabeza, mi psicólogo me aconsejó que aprovechase mi faceta de escritora para reflejar de una forma más fácil mis sentimientos, mis pensamientos, todo eso. Y siguiendo, a su vez, los consejos de ciertas personitas especiales de internet, decidí abrir un blog con la finalidad de acercarme más a mí misma y a mi mente.

No sé cómo saldrá esto, pero la intención es buena.